jueves, julio 14, 2005
martes, julio 12, 2005
lunes, julio 11, 2005
El luto no es patrimonio de nadie. Es un dolor común.
Hemos de hacer caso omiso del poder nefasto que ostenta Occidente. La muerte no conoce religiones, culturas u tradiciones. Nu conoce clases ni a personas. La muerte solo es reconocida en el corazón, ese ente que, de norte a sur, de este a oeste, nos hace vivir.
Más de 50 muertos en londres. Cuantos van en el mundo? Guardaré todo el luto que haga falta por esa pobre gente inocente. Pero no somos más que un ladrillo más en esta estructura que es la Guerra. Directa o indirecta. Declarada o traicionera. 50 muertos no han e tapar los miles que mueren en Irak, y viceversa. Cada muerto acentúa una verdad.
Un puñado de líderes nos están asesinando. Unos en nombre de la justicía. Otros, en nombre de un Dios. Nada más lejos de la realidad. Nuestro primer paso es expresar nuestra inteligencia popular. Un dios se lleva en el corazón. Y la justicía vive en nuestra sociedad, no en la pluma ni en las armas de nadie.
Todos luchan por cosas mucho más materiales. Sin pensar ni en sus futuros nietos, dichos personajes mantienen con vida algo tan falsamente obsoleto como es el imperialismo.
Solo nos queda luchar por el fín de todo esto. Todos llevamos en nuestro corazón a todas, todas las víctimas. Que sus muertes no sea en vano y que nos empujen a impedir que un muerto conlleve otro. Un cadaver debe ser el abono para una nueva vida, no la Parca de otra alma.
Desde aqui expreso mi más sincero dolor por las inocentes víctimas de londres. Y ese dolor nunca ha desaparecido, por que el infierno vive en todo el mundo desde hace mucho, mucho tiempo.