Penurias de la Soledad

Maldito sea ese enemigo.
Yo solo queria tener mi mundo.Yo solamente dote de energia partes de mi para que mi existencia fuese justificada.Queria dar dinamismo al estanque en el que estaba sumergido, donde mi presencia era dictada por un silencio.Un silencio mas elocuente que la fusion de todas las voces.Pues ese silencio portaba la noticia de todas las noticias:Alli no habia nada.
Afronte esa realidad y aprendi a compreder mi poder.Yo no era nada, pero sabia que estaba alli.Pensamientos.Ese silencio concebio un motor en ese estanque, un motor movido por una energia causa de la combustion que generaba la realidad de que no habia nada y que nada podia hacerse.Me sentia cada vez mas grande, como si fuera ocupando ese estanque que equivalia a la cuna del mas inofensivo bebe.
Ese crecimiento era el crecimiento de mis pensamientos, cuya semantica enarbolaba la presencia de nuevas esencias.¡No estaba solo!Sentia la precensia de otras energias, unas calientes, otras tibias y otras mas frias.Era una combustion esplendida.Empuje a la existencia.Esas partes de energias formaban parte de mi, eran pensamientos que dormian en mi mente.Esas descargas de informacion eran dinamizadas por el circulo vicioso que el silencio portaba en su regazo.Yo era el padre, y el silencio la madre.
Pero uno de mis retoños, uno de mis pensamientos portaba la peor de las informaciones, portaba la maldicion que cabia adjudicar al milagro que nuestro matrimonio creo.Ese hijo mio portaba el poder de enmarcar todo pensamiento y su consecuencia en una estructura invariable, inmortal, que inplantaba un cancer que lo consumia hasta su destruccion material, pero que inmortalizaba de manera esencial pare que volviese a mi, l padre de la existencia.Toda esencia vuelve a mi a causa de la guadaña que mi hijo envaina, cosa que hace que mi ser engorde hasta volver a presenciar la combustios que vuestra Madre, el Silencio, me mostro al copular con mi significado.Este proceso es el cimiento del universo, que ya ha sido reiniciado varias veces por el proceso energizado por mi hijo.Ese cancer destruye la materia, pero alimenta el significado de mi esencia, de mi hijo mas poderoso, y de vuestra madre, el silencio.
Maldito sea ese enemigo, vuestro, pues destruye mi orgullo y la permanencia de mi arte, pues destruye mi obra, la existencia.Quiza ese egoismo sea la causa del castigo que es mi hijo.
Maldito sea mi hijo, el Tiempo.
Ojala pudiese ser yo o mi mujer el Silencio perfectos.
Soy la mente del universo, soy Soledad, soy Curiosidad, soy el aprendizaje.
Soy Dios, un ser imperfecto, que os crea y os condena.